Tan difícil de ver...¡incluso sus rastros evitan plasmarse para no manchar la planta del pie! Salvo zonas concretas de la península, en el resto de su área de distribución, es un animal harto difícil de ver. No conseguí ver ninguno en 2 años que viví en la Sierra de Javalambre (Teruel), donde según testimonios de cazadores, sabían de su presencia. No lo vi en casi 3 años en el pirineo oscense, donde un par de años más tarde, vería una huella que parecía de la especie. Allí, también lo había, y nunca logré verlo.
Deduzco que en cualquiera de los 2 sitios, la densidad debía de ser mucho menor que en la cordillera, pues no veía ni tan siquiera excrementos, ¡y cagar, tienen que cagar igual que los de aquí!
Efectivamente, aquí no es raro encontrar excrementos de la especie, aunque más difícil es encontrar huellas, pues tienden a rodear las zonas embarradas, susceptibles de dejar plasmada su pisada.
En esta ocasión, pudimos disfrutar de un rastro tan claro, que me hacía dudar sobre su origen. Esto es como cuando ves un pájaro en tu mano...estás acostumbrado a verlo a más de 10 m con los prismáticos, en posturas difíciles, volando, observaciones de medio segundo...y lo conoces, pero te lo ponen en la mano...y dudas.
Esta huella, con 4 dedos, sin uñas, y con almohadilla claramente trilobulada, es una huella de libro. Es difícil de encontrar tan definid. Por ello, este homenaje para ella. Es de una pata anterior, pues tiene la superficie de los dedos bastante alargadas. Parece de un gato no muy grande, probablemente hembra.
Aprovecho para decir, que no se pueden distinguir de las de Gato Doméstico (el que sepa cómo...que levante la mano). Yo "la vendo" como de Gato Montés, porque está en un territorio de esta especie, y porque frecuento esa zona y nunca he visto ninguno doméstico, pero por supuesto que me podría equivocar (en las huellas...siempre existe una menor o mayor incertidumbre...).
Vaya suerte teneis en la penísula...son inmensas ls posibilidades de trabajar con rastros!!!!
ResponderEliminarun saludo.