Vayas por la calle que vayas, siempre hay un ojo que te ve, como decía la canción.
Incluso en los montes que pensamos que estamos sólos, siempre hay algún ojo viéndonos. Si no hay árboles, porque estás a la vista, y si los hay, porque ellos también tienen sus particulares ojos.
Esta foto, fresquita (1 hora desde que la saqué) demuestra que el bosque nos ve en cada movimiento aunque nosotros nos sintamos sólos.
guapo, guapo,ahí le tienes vigilandote, así cuidaín
ResponderEliminarUna maravilla... que bonita foto
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